Chan Chan (Cultura Chimús)
En la costa norte del Perú, se encuentra la fortaleza de Chan Chan, la principal ciudad de la antigua cultura Chimú. Los Chimú, fueron una gran civilización que vivió de la pesca, agricultura y ganadería. En el año 1470, fueron conquistados por los Inkas, finalizando con su esplendor.
La ciudad de Chan Chan, te conecta con la perfecta manera que los Chimús tenían de convivir con su entorno natural, ya que el color de sus muros es idéntico a las dunas donde ellos vivían.
El caminar por sus ruinas, te da la sensación de la desolación que debieron sentir los Chimús al verse forzado a abandonar su fortaleza. Se siente esa frustración de tener que dejar algo muy preciado, que les había costado años de trabajo y devoción.
A partir de la experiencia de estar allí, escribí la siguiente reseña, que invito cordialmente a leer:
Suena el viento en las dunas de Chan Chan
Pesaba la red
Pero estaba llena de peces y pulpos
Estabas orgulloso
Porque tenías algo que entregar
El mar te había retribuido tu esfuerzo
Y tu mujer te esperaba con un abrazo,
Tus hijos te admiraban
Querían ser pescadores como tu
Fuertes y trabajadores
Diestros en la navegación
De los caballitos de Totora.
Esa noche saliste a agradecer a la diosa Shi
Sin la luna no podrías haber hecho nada,
Te levantarías temprano
Para ofrendarle algunas de tus pertenencias.
Dejaron de lado la pesca y las cosechas
Para defenderse de los invasores.
No permitirían la invasión
Eran una civilización demasiado fuerte
No podrían vivir sin venerar a su Ciquic y a Shi
Pero tenían miedo,
Los Inkas tenían fama de poderosos
Y no tenían escrúpulos en avasallar.
Lucharon bajo la luz de la luna,
Pero en el ciclo lunar también existe la oscuridad.
Los Inkas no habían resultado ser tan fuertes
Sus ejércitos estaban a la par,
Y sus tropas se habían escondido en las llanuras lejanas.
Se retiraron! Gritaban los niños, nuestros padres vencieron!! decían
Pero él sabía que no era así,
Los Inkas tramaban una represalia
Y cortaron el suministro del agua
La fuente de vida, también es la fuente de la muerte
Sin agua ya no podrían resistir el calor del desierto
Y tuvieron que entregarse
Presos, separados y malogrados
No tuvieron otra opción que dejar su vida
Y reemplazar el culto a la luna
Por la devoción a Inti.
En caravanas abandonaron su ciudad
Las lágrimas que botaron al suelo seco
Aún siguen cayendo en las inesperadas lluvias
El viento y la arena acabarán por corroer nuestras raíces
No pudimos vencer, no pudimos
Suena el viento en las dunas de Chan Chan.
En las noches de luna aún se escucha el llanto
De los Chimús, y su desolación aún mira con temor
Al visitante que camina por las ruinas de su decepción
Pero los niños aún albergan la esperanza
De ver retornar a su padre
Como lo solía hacer cuando volvía
De sus largas aventuras en el mar.
En la costa norte del Perú, se encuentra la fortaleza de Chan Chan, la principal ciudad de la antigua cultura Chimú. Los Chimú, fueron una gran civilización que vivió de la pesca, agricultura y ganadería. En el año 1470, fueron conquistados por los Inkas, finalizando con su esplendor.
La ciudad de Chan Chan, te conecta con la perfecta manera que los Chimús tenían de convivir con su entorno natural, ya que el color de sus muros es idéntico a las dunas donde ellos vivían.
El caminar por sus ruinas, te da la sensación de la desolación que debieron sentir los Chimús al verse forzado a abandonar su fortaleza. Se siente esa frustración de tener que dejar algo muy preciado, que les había costado años de trabajo y devoción.
A partir de la experiencia de estar allí, escribí la siguiente reseña, que invito cordialmente a leer:
Suena el viento en las dunas de Chan Chan
Pesaba la red
Pero estaba llena de peces y pulpos
Estabas orgulloso
Porque tenías algo que entregar
El mar te había retribuido tu esfuerzo
Y tu mujer te esperaba con un abrazo,
Tus hijos te admiraban
Querían ser pescadores como tu
Fuertes y trabajadores
Diestros en la navegación
De los caballitos de Totora.
Esa noche saliste a agradecer a la diosa Shi
Sin la luna no podrías haber hecho nada,
Te levantarías temprano
Para ofrendarle algunas de tus pertenencias.
Pero el Ciquic estaba intranquilo
Ustedes se armaron
Para defenderse de los invasores.
No permitirían la invasión
Eran una civilización demasiado fuerte
No podrían vivir sin venerar a su Ciquic y a Shi
Pero tenían miedo,
Los Inkas tenían fama de poderosos
Y no tenían escrúpulos en avasallar.
Lucharon bajo la luz de la luna,
Pero en el ciclo lunar también existe la oscuridad.
Los Inkas no habían resultado ser tan fuertes
Sus ejércitos estaban a la par,
Y sus tropas se habían escondido en las llanuras lejanas.
Se retiraron! Gritaban los niños, nuestros padres vencieron!! decían
Pero él sabía que no era así,
Los Inkas tramaban una represalia
Y cortaron el suministro del agua
La fuente de vida, también es la fuente de la muerte
Sin agua ya no podrían resistir el calor del desierto
Y tuvieron que entregarse
Presos, separados y malogrados
No tuvieron otra opción que dejar su vida
Y reemplazar el culto a la luna
Por la devoción a Inti.
En caravanas abandonaron su ciudad
Las lágrimas que botaron al suelo seco
Aún siguen cayendo en las inesperadas lluvias
El viento y la arena acabarán por corroer nuestras raíces
No pudimos vencer, no pudimos
Suena el viento en las dunas de Chan Chan.
En las noches de luna aún se escucha el llanto
De los Chimús, y su desolación aún mira con temor
Al visitante que camina por las ruinas de su decepción
Pero los niños aún albergan la esperanza
De ver retornar a su padre
Como lo solía hacer cuando volvía
De sus largas aventuras en el mar.
weeena! wn la cago como se quiere existir siendo y haciendoce uno con tu tierra.
ResponderEliminarsigue escribiendo men! que toy haciendo clases de historia con tu blog!!! jajajja salu2 a la fabi! abrazos y luz!
Foncho manfred
Que profundo y bello..Siento la pena de ellos...la traspasa el papel... tus palabras...
ResponderEliminarNo pudimos vencer, no pudimos
Suena el viento en las dunas de Chan Chan.
Excelente poema...
Amigos gracias por los comentarios. Manfred que bueno que estés aprendiendo. Afortunados los que leen, porque conocen mundos nuevos sin moverse de su escritorio o biblioteca jaja, saludos hermano.
ResponderEliminarAnónimo gracias por haber leído, me gratifica que pueda transmitir sentimientos, muchos saludos a todos, y que sigan leyendo el blog, porque estoy subiendo poemas y articulos casi todas las semanas.
Mientras más comentarios hagan, más me motivo a escribir, Gracias!!
Que bonita poesia....
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